4. RIESGO DE TIPO DE CAMBIO
El riesgo de tipo de cambio surge del hecho de que los inversores suelen revaluar sus activos en euros (EUR). Así, al suscribir un fondo denominado en una divisa distinta al EUR, el inversor estará expuesto a la variación del valor de dicha divisa frente a la divisa europea de referencia, el Euro. En el límite, si el valor del fondo permanece sin cambios y el tipo de cambio de la divisa de denominación original contra el EUR cambia, el valor de la unidad se ve afectado.
También debe tener en cuenta que invertir en fondos denominados en EUR puede conllevar un riesgo cambiario. En ocasiones, las sociedades gestoras ofrecen fondos de inversión denominados en EUR pero cuya composición de cartera incorpora exposición a otras divisas. Un ejemplo son los fondos de renta variable estadounidenses denominados en EUR. El valor de la participación del fondo se convierte de la moneda original a EUR todos los días, según la fijación diaria. En el límite, si el valor del fondo permanece sin cambios y el tipo de cambio de la divisa de denominación original contra el EUR cambia, el valor de la unidad se ve afectado.
Existen fondos que cubren el riesgo cambiario (comúnmente llamados fondos de cobertura de divisas) y que permiten mitigar el riesgo de variaciones adversas en los tipos de cambio.